Emoción y huerto en verano.
Cada nueva temporada que comienza se llena de expectativas culinarias. El huerto es siempre una sorpresa y habitualmente de las que siempre agradan. Sabéis cuánto nos gusta probar nuevos cultivos. Son ya meses que han pasado desde que sembramos la semilla en muchos casos y es ahora en estas semanas cuando crece la impaciencia para probarlos.
Nuevas variedades de tomates que vamos viendo cada día cómo se van formando. Algunas berenjenas con las que nos encaprichamos, pimientos que nos regalan amigos sabiendo cuánto los disfrutamos o las judías de enrame que florecen dando ese toque tan elegante al huerto de verano. Y todavía nos quedan algunas verduras que poco a poco vamos sembrando.
Y así vamos consiguiendo la base del sabor de nuestros platos y los nutrientes que necesitamos para alimentarnos. No me digáis que no es para estar emocionados .
Cómo cambian los sabores y las texturas de las verduras de invierno y primavera muchas de ellas verdes y crujientes,y pasamos a los tiernos, melosos, cálidos cultivos de verano. Sabores dulces y colorido de lo más variado.
Ayer y tomamos el primer tomate de temporada y aún estamos saboreándolo. Os prometo que este primer tomate es el más esperado. Preparamos una ensalada sencilla con un poco de aceite de oliva virgen extra y sal. Así es como nos gusta estrenar los tomates con sabor que nos sorprenden año tras año. Pero no sólo ellos, las berenjenas son otro regalo. Suelen tardar un poco más pero llegan cargadas de sabores mágicos. De momento solo tenemos calabacines pequeñitos que también vamos cosechando y las primeras judías que tanto juego dan en la cocina y que tanto disfrutamos.
La espera se hace cada vez más emocionante porque sabemos que llega sin duda, la mejor temporada de sabor del año.
Si, lo sé, se nota que sembrar nuestras verduras nos tiene cada vez más enamorados, por eso siempre os animo a que lo vayáis experimentando y pongáis algo de huerto en casa este verano.