Cada vez que hacemos en casa esta ensalada, los buenos recuerdos y sabores de las comidas de mi madre en Jaén, me inundan la memoria y se me ponen los pelos de punta de la emoción.
Siempre voy a recordar con muchísimo cariño los tapers con esta ensalada ya preparada, los botes con los pimientos en conserva, o incluso los pimientos enteros junto con la lata de caballas, atún o melva en aceite de oliva para que pueda darme ese lujo aún estando lejos de ella.
El ingrediente básico de esta receta es el aliño elaborado con Aceite de Oliva Virgen Extra, el oro líquido que inunda mi tierra; Úbeda (Jaén)
Preparación
Retiramos la piel de los pimientos asados y limpiamos bien todas las semillas. Los apartamos en un cuenco y con ayuda de unas tijeras los cortamos para dejarlos bien picados. El proceso es siempre manual, pues si lo hacemos con una picadora el pimiento perdería la mayor parte de los jugos, y no queremos que eso ocurra. Preparamos un majado con el comino, el orégano, el ajo, la yema del huevo y la sal.
Agregamos las caballas (o el atún), el resto del huevo cocido y volvemos a picar finamente hasta que nos quede todo el conjunto integrado. Le ponemos el vinagre (al gusto) y mezclamos bien. Ahora, al majado que tenemos en el mortero, le añadimos un buen chorreón de aceite de oliva virgen extra, movemos bien y agregamos a la ensalada. Podemos añadirle más aceite, pues el secreto es usar un Aceite de Oliva Virgen Extra de calidad.
Recomendaciones del autor
Se recomienda servir a temperatura natural, y reposada para que el aceite se “asiente” en el plato e integre bien los sabores. Normalmente se prepara para comer de un día a otro, y si hacéis la prueba os daréis cuenta de como mejora. Y como no, la mejor opción es mojar con un buen pan ¡¡deliciosa!!